El delito de abandono de familia está regulado en los artículos 226 y siguientes del Código Penal. Este delito protege el derecho a la asistencia de los hijos, cónyuge y ascendientes y castiga a aquellas personas que tengan la custodia o asistencia legal y falten a sus deberes inherentes a la patria potestad o tutela o no presten la asistencia necesaria.
El abandono de familia se produce cuando un miembro de la familia no cumpla con sus obligaciones creando una situación de desprotección a los demás miembros de la familia, incluyendo no solo la desatención a las funciones de la patria potestad, sino también aquellos aspectos económicos que afecten a las personas bajo su cargo. Esta norma penal busca proteger a las personas más desprotegidas que necesitan asistencia en sus necesidades básicas como la salud, alimentación, vestimenta y higiene.
Especializados en abandono de familia
El abandono de familia es un delito en el que un progenitor incumple sus obligaciones legales con respecto a sus hijos, cónyuge o ascendientes. Puede ser el abandono de los deberes de la patria potestad o el abandono del cuidado económico. En el primer caso, el progenitor incumple sus obligaciones de cuidar, educar y alimentar a sus hijos, mientras que en el segundo caso, el progenitor deja de pagar la pensión alimentaria. Para considerarse abandono de familia, el incumplimiento debe ser reiterado y durante dos meses consecutivos o cuatro no consecutivos. Este delito puede tener graves consecuencias legales, incluida la pérdida de la patria potestad. Además, es un delito perseguible solo a instancia de parte y no puede ser perdonado por la persona agraviada. Para que se cumpla el ilícito penal, es necesario que el sujeto activo tenga la obligación legal de asistir a su familia y conscientemente no lo haga, y que la obligación jurídica de pagar pensiones alimentarias o compensatorias esté reconocida en una sentencia. En nuestro despacho, contamos con un equipo de profesionales especializados en la defensa de sus intereses en estos delitos.